Me ha gustado mucho este hotel. Su ubicación tranquila en el centro era una gran ventaja. Además, estaba a poca distancia de los Abrigos De Mallata. 😊.

Zona común para picnic. Localización pintoresca. Vistas desde el solarium. Personal amable y servicial.

Para nosotros fue ideal.

En general, ha sido un gran lugar para hacer turismo en Otívar, me he divertido mucho. Me ha encantado casa con vistas a las montañas. La ubicación era tranquila, a 5 minutos a pie del centro. El distrito Albaicín valía la pena visitarlo...

nos ha encantado nuestra estancia de 2 días. la habitación que nos dieron tenía un horno de microondas, una nevera y una zona de comedor. teníamos un baño privado.

La habitación doble con balcón y aire acondicionado era súper acogedora. Disfruté mucho de la vista a la ciudad desde la terraza. Como mochilero, me sentí como en casa.

El olor en el baño era un poco desagradable, pero es solo mi opinión.

Me encantó este hotel y todo lo que tenía para ofrecer. 😍.

Este lugar es genial. Es perfecto para descubrir los lugares interesantes que hay por aquí. 🌟.

Me ha gustado todo, os lo aconsejo. Diría que es un excelente lugar para alojarse y explorar Otívar.- La ubicación es tranquila en el centro de Otívar, se puede llegar andando a todas partes.

Este lugar es ideal para hacer turismo y explorar la zona, con una ubicación tranquila cerca de la Calera y a solo 5 minutos del centro de la ciudad.

La terraza espectacular, el colchón cómodo y la ubicación bien. La chica que nos atendió fue muy amable y nos explicó todo, todo perfecto.

Nada negativo.

Pedí una almohada y me la trajeron, lo cual fue muy amable por parte del personal. Además, disfruté mucho de la zona común donde pude preparar un picnic y guardar alimentos en el frigorífico. También me encantó la ubicación del hotel en las callecitas pintorescas del pueblo y las vistas desde el solarium. A pesar de algunos inconvenientes, en general recomendaría este hotel.

Encontré algunas deficiencias en el baño, como la falta de espacio para colgar la ropa y la ausencia de una balda para apoyar los productos de higiene. También existía el problema de que el agua de la ducha se salía del plato, dejando el suelo del baño mojado.

La habitación tenía equipo de cocina, nevera y vista a las montañas desde el balcón.